La Liga, la máxima categoría del fútbol español, no ha impresionado en cuanto a «movimientos de tropas» este invierno. Ninguno de los principales clubes españoles ha realizado grandes fichajes.
Sin título de Liga en 2019, el FC Barcelona parece decidido a destronar a su gran rival, el Real Madrid, para el que 2022 fue un año casi perfecto. El éxito en la Supercopa de España de enero ha dado alas al equipo catalán, que está decidido a no aflojar el ritmo hasta el final de la temporada. El hecho de que el engranaje del equipo esté funcionando muy bien ha llevado a Xavi a no adquirir ningún jugador este invierno. Sin embargo, sorprende la marcha de Memphis Depay, fichado en 2021 procedente del Lyon. Depay fue vendido por sólo cuatro millones de euros a otro rival, el Atlético de Madrid.
El Real Madrid tampoco ha movido ficha en el mercado de fichajes, con Carlo Ancelotti apostando por el mismo grupo de jugadores, pero sobre todo por el muy buen estado de forma del francés Karim Benzema, Balón de Oro 2022. Sin embargo, debido a las lesiones, Benzema ha jugado poco esta temporada, pero la mayoría de las veces ha sido decisivo para el Real.
La llegada a mediados de octubre del entrenador argentino Jorge Sampaoli como sustituto de Julen Lopetegui (que se marchó al Wolverhampton) no fue el cambio que esperaban los aficionados del FC Sevilla. Tampoco las adquisiciones de este invierno, Lucas Ocampos (Ajax – regresa de su cesión), Pape Gueye (Marsella – cedido) y Bryan Gil (Tottenham Hotspur – cedido), han aportado ningún valor añadido al equipo andaluz, que sigue en zona de descenso.
La Real Sociedad, revelación de la presente temporada de Liga, continúa con su política conservadora. El conjunto vasco de la mano del mismo entrenador, Imanol Alguacil, de 51 años, que lleva en el cargo desde 2018, y del mismo grupo de jugadores, de la que destacan el noruego Alexander Sorloth, Brais Méndez, Martín Zubimendi y el japonés Takefusa Kubo, no realizó transferencias significativas.
